Por Andres Fuentes
Jorge Almirón todavía no encuentra a su once ideal. Si bien nunca se caracterizó justamente por cazarse con una alineación fija, tampoco tiene al día de hoy una base confiable que lo termine de ayudar para desapegar por completo. Es que es cierto que de su mano Boca Juniors mejoró notablemente, pero aún no logra ser constante con los rendimientos y la irregularidad manda.
Uno de los exponentes de esa irregularidad es Óscar Romero, quien desde su estadía en el Xeneize a comienzos del 2022 tuvo varios altibajos en su rendimiento, aunque ahora no despega. Esto desembocó en el que entrenador lo margine del equipo titular y juegue a cuenta gotas entrando desde el banco de los suplentes, algo que ni siquiera pudo lograr frente a Deportivo Pereira.
Ya sea por Martín Payero o Norberto Briasco, el ex San Lorenzo ve como el tren pasa de largo y no demuestra nada. En paralelo, un competidor nato por su puesto como podría ser Nicolás Lodeiro es noticia. El uruguayo, quien viste la camiseta del Seattle de la MLS, es seguido de cerca por el Nacional de su país, pero según medios partidarios, retrasó su respuesta ya que espera el llamado de Boca, ¿Levantará el teléfono Riquelme?
El ex hombre del Ajax y Corinthians cuenta con un pasado bueno en Boca, en el cual acumula 51 partidos jugados y 11 goles, uno de ellos ante ni más ni menos que ante River para un triunfo por 1-0 en el estadio Monumental. Además, conquistó la Superliga 2015 y la Copa Argentina de esa misma temporada. Con destellos de magia y habilidad, sigue cautivando en Norteamérica, y espera hacerlo en Brandsen 805.
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