A pesar de no ser el mejor, el motivo que pone a Simeone otra vez en la cima

Codearse con Real Madrid y Barcelona por más de 10 años no es fácil ni por asomo ni cosas de todos los días debido al poderío que ambos tienen en España y en Europa principalmente. Pero desde enero de 2012, hace casi 12 años, Diego Simeone rompió con todos los pronósticos hegemónicos de los dos colosos del fútbol español y se convirtió en el tercer equipo del país mencionado por vencer para el resto de los 17 clubes de la elite nacional.

Dos ligas locales, además de la Copa del Rey, la supercopa europea, la supercopa española y la UEFA Nations League, sumadas a dos finales de UEFA Champions League perdidas en 2014 y 2016 de manera increíble frente a su clásico rival de la ciudad capital, son motivos y galardones más que suficientes para tirar por tierra y por la borda el hecho de que solamente el Merengue y el Barca son los más grandes de la nación ibérica.

Pese a que no esté en los primeros dos puestos de la actual tabla de posiciones, con la victoria de ayer por 1 a 0 frente a Sevilla en condición de local, por una fecha postergada que ambos conjuntos tenían por disputar, alcanzó la tercera colocación liguera, se despegó del cuarto que es Barcelona y está a tiro de los dos líderes actuales: el combinado blanco mencionado y el sorprendente Girona de Cataluña. A un triunfo y medio de diferencia, el Cholo va por su tercera estrella de liga en menos de 15 años.

La gran razón por la cual el Aleti deberá ilusionarse con el título

Según Mundo Deportivo, teniendo en cuenta todos los encuentros desde la jornada 16 de la temporada pasada hasta la 18 de la actual, se han disputado un total de 40 partidos en 2023. El Barça ha ganado 27 de ellos, ha empatado siete y ha perdido otros siete. El mismo balance que el Atlético de Madrid, que tiene mejores registros goleadores. Los de Xavi suman 70 goles, 13 menos que los de Simeone.