La historia del "9 de diciembre, versión Boca Juniors"

El 9 de diciembre quedará para siempre en el corazón de los hinchas Millonarios como la fecha en la que, según ellos, River ganó la Copa Libertadores en lo que fue "el partido más importante de la historia del Superclásico": fue 3 a 1 en el estadio madrileño Santiago Bernabéu ante el rival de toda la vida, Boca. 

Sin embargo, antes de ese día de 2018 eran los fanáticos del Xeneize los que recordaban con orgullo ese casillero del calendario. Es que en esa jornada de 1962 su equipo le ganó 1 a 0 a River en la penúltima fecha del campeonato y virtualmente se consagró campeón. Previo al trascendental partido, ambos conjuntos iban primeros en la tabla con 39 unidades.

Pero lo que más se recuerda de ese clásico jugado en la Bombonera no fue el gol del brasileño Valentim, sino el penal que le atajó Antonio Roma, arquero Boquense, a Delem cuando el partido moría. La eterna polémica fue el adelantamiento de Tarzán que posibilitó la parada del tiro, para indignación de los jugadores de River. 

El eje de la controversia fue el árbitro Carlos Nai Foino, quien ante los reclamos de los Millonarios brindó una respuesta para la posteridad: "Aire, aire, salgan, córrase, basta de llorar, penal bien pateado es gol. Les doy un penal en la cancha de Boca, faltando cinco minutos, se juegan un campeonato, lo patean como el orto y lo quieren patear de vuelta. Basta de llorar. Penal bien pateado es gol". A 59 años del "9 de diciembre, versión Boca".