Por Ramiro Diaz
Sergio "Chiquito" Romero fue una de las piezas clave para que el Club Atlético Boca Juniors alcanzara la final de la Copa Libertadores 2023. Su desempeño sobresaliente no solo se reflejó en el nivel mostrado durante los partidos, sino especialmente en las tandas de penales que enfrentó el Xeneize desde los octavos de final en adelante. En cada definición desde los doce pasos, Romero se destacó, brindando seguridad bajo los tres palos. Sin embargo, en la final disputada, Boca cayó 2-1 en los 120 minutos ante Fluminense, en un encuentro donde no hubo oportunidad para los penales, cerrando así la ilusión del club sin el ansiado título.
Desde el inicio de 2024, el rendimiento del ex arquero de la Selección Argentina decayó de forma notable. En 38 partidos disputados en el año, recibió 35 goles y fue señalado como responsable en varias de esas acciones, lo que generó una fuerte ola de críticas por parte de los hinchas. El malestar de los fanáticos se hizo más evidente en las redes sociales, donde le reprocharon su bajo nivel y falta de confianza. La relación terminó de quebrarse luego de su reacción en La Bombonera, tras ser insultado por la derrota frente a River Plate en el Superclásico. A raíz de este episodio, la dirigencia del club decidió sancionarlo con dos partidos de suspensión. No obstante, Romero recuperó la titularidad en el encuentro frente a Tigre en Victoria, donde nuevamente tuvo una actuación por debajo de las expectativas.
Ante este contexto, comenzaron a circular rumores sobre la posible búsqueda de un arquero de jerarquía para reforzar la competencia interna con Romero y el joven Leandro Brey. Sin embargo, recientemente se reveló que Boca ya descartó dos opciones que habían sido ofrecidas. El periodista Diego Monroig informó en ESPN: “Ofrecieron dos arqueros a Boca. Uno de ellos es Washington Aguerre, arquero de Peñarol, y el otro es Guido Herrera, de Talleres de Córdoba”. Según Monroig, la respuesta del club fue clara: “Boca agradece, pero ahora no estamos pensando en incorporar un arquero”.
Esta decisión sugiere que, a pesar de las críticas y del deseo de muchos hinchas de que Romero no continúe como titular, todo indica que seguirá siendo el portero principal en la próxima temporada. La determinación de la dirigencia demuestra confianza en el arquero, apostando a que recupere el nivel que lo convirtió en una figura determinante en la Libertadores 2023, aunque su presente genere serias dudas en el entorno del club y la gente.
01/12/2024
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30/11/2024
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