Por Andres Fuentes
Tras caer ante Deportivo Pereira por Copa Libertadores, Boca Juniors debía dar vuelta la página, cambiar el chip y enfocarse en el plano doméstico. Es por eso que en el marco de la fecha 18 de la Liga Profesional de Fútbol recibió en La Bombonera a Tigre, teniendo en frente a viejos conocidos: Mateo Retegui, Facundo Colidio, Aaron Molinas y Sebastián Prediger, todos ex hombres del Xeneize.
Ambos necesitan quedarse con los tres puntos para no perderles pisada a los de arriba, y quien salió decidido a hacerlo fue el conjunto que dirige tácticamente Jorge Almirón. Es que sus conducidos avisaron apenas a los cuatro minutos sus intenciones, con un remate de Luis Advíncula que rebotó en un defensor y salió cerca. Minutos después, abrió el marcador gracias a Miguel Merentiel, con una pequeña ayuda del arquero Marinelli.
En la segunda parte, el dominio de Boca siguió adelante ante un rival que esperaba agazapado, tratando de meter una contra letal. Pero este tridente de ataque surgido de las divisiones menores del Xeneize se topó con una férrea zaga central, conformada por Nicolás Figal y Bruno Valdez, quien regresó de una larga lesión. El hueco en el once inicial Lo dejó Facundo Roncaglia, de flojo nivel.
Sin tener ninguna lesión o molestia física, el ex hombre de la Fiorentina se quedó afuera de la lista de concentrados para este partido. Probablemente, el entrenador se dio cuenta que gran parte de los errores que tenía el equipo venían de su mano y con el paraguayo recuperado, lo borró. Con contrato hasta el 30 de junio, Roncaglia tiene un futuro extremadamente incierto en la institución.
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