El jugador de Boca que los hinchas resisten pero que Riquelme perdonaría

Luego de bastantes semanas de descanso, Boca Juniors está muy cerca de retornar a la actividad física y la próxima semana (6 de diciembre) iniciará la pretemporada de verano en el predio de Ezeiza. A la espera de la confirmación oficial, la continuidad de Hugo Ibarra como entrenador es prácticamente un hecho y ya se puso de acuerdo con el Consejo del Fútbol de palabra, según trascendió. 

El ratificado entrenador evaluará puntualmente qué futbolistas serán tenidos en cuenta y quiénes saldrán con las valijas hechas en busca de más minutos. El ex lateral derecho realizó algunos pedidos concretos y uno de ellos era el regreso de Mateo Retegui. Sin embargo, finalmente el club no ejecutó la cláusula de repesca por el delantero que continuará su préstamo en Tigre hasta diciembre de 2023.

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Teniendo en cuenta estas condiciones,  el ‘Negro’ contará con cuatro centro delanteros para las próximas competencias. Por jerarquía, experiencia y peso propio, Darío Benedetto es quien corre con más ventaja para la titularidad y dentro de la consideración, lo seguirían Luis Vázquez y Gonzalo Morales, ambos juveniles pero con recorrido en primera división, sobre todo Vázquez.

Distinto es el caso de Nicolás Orsini. Las lesiones lo alejaron de las canchas y por momentos quedó relegado ante la aparición de otros nombres. Sin embargo, el 2023 será una nueva oportunidad para el atacante que cuenta con el apoyo de Juan Román Riquelme, según informó el periodista Martín Costa en Radio Continental. “Riquelme tiene un gusto por Orsini y cree que tiene para dar, aunque entiende que las cosas no le salieron como él creía”.

Las flojas estadísticas de Nicolás Orsini en Boca

El delantero arribó desde Lanús a mediados del 2021 y jamás estuvo a la altura de lo que exige una institución como Boca. Chances tuvo: disputó 34 partidos con la camiseta azul y amarilla (16 de titular) y apenas logró marcar 4 goles, dos de ellos a Central Córdoba de Rosario, de la cuarta división de Argentina. Román le daría otra chance más, pero si llega otro en su sitio podría irse.