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De disputar territorio en el bajo a “El Monumental”: la historia de la cancha de River Plate

Desde que nació el Club Atlético River Plate y con él, la rivalidad eterna con su contraparte Boca Juniors, el sitio donde jugó a lo largo de los años también tuvo su propia historia.

Por Julián López Navarro

Desde que nació el Club Atlético River Plate y con él, la rivalidad eterna con su contraparte Boca Juniors, el sitio donde jugó a lo largo de los años también tuvo su propia historia.
Desde que nació el Club Atlético River Plate y con él, la rivalidad eterna con su contraparte Boca Juniors, el sitio donde jugó a lo largo de los años también tuvo su propia historia.
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¿Dónde nació River Plate?

 

Si bien en la actualidad, y hace muchos años, la sede del Club River Plate es en el barrio porteño de Núñez, en sus comienzos, nació cerca del puerto de Buenos Aires. Específicamente, en el barrio de la Boca, al igual que el club que lleva el nombre del barrio. Desde ese momento, comenzó la rivalidad entre ambos equipos que aún sigue vigente en la actualidad. 

 

La rivalidad entre ambos equipos terminó definiendo también su lugar: en un partido entre ambos se disputaron el barrio y desde luego que ganó Boca Juniors, por lo que obligó a River Plate a abandonar la Boca. De esta manera, y sin un rumbo tan fijo, el club millonario se instaló en el barrio de Núñez, en una de las que por aquel entonces era de las zonas más acaudaladas de la ciudad. 

 

 

Debido a esta relocalización del club a esa región de la ciudad de Buenos Aires, es que también River Plate se ganó entre tantos sobrenombres, el apodo de “Los millonarios”. A partir de establecer su sede allí, comenzaron las obras para empezar a construir la historia de “El monumental”. 

La herradura monumental al Río de la Plata 

El nombre original del club deriva de Río de la Plata en inglés, denominado así por los marineros que desembarcaron en el puerto de Buenos Aires. Por aquel entonces, recién llegados al barrio, River Plate empezó la construcción de su estadio, el cual al principio tenía forma de herradura. Inaugurado en el año 1938, El Monumental albergó un partido amistoso entre River Plate y el club Peñarol de Uruguay. 

 

Para la realización del estadio se solicitó un crédito y en aquellos tiempos, se consideró toda una sorpresa que semejante estructura se haya edificado en menos de dos años. Por aquel entonces, fue todo un récord. Pese a su rápida construcción, los planes no salieron como se esperaba, y River Plate inauguró un estadio con forma de herradura con vista al Río. 

 

Fue uno de los más grandes del momento, aunque su estructura estaba incompleta porque el presupuesto destinado para la obra no fue suficiente para “cerrar” el estadio de River Plate. Durante muchos años, se lo conoció como “La Herradura monumental” y durante esos años, River dio al fútbol local grandes figuras y momentos. 

 

Enrique Sívori y el fin de la herradura 

 

Después de la exitosa campaña de “La Máquina” en los años 40 con una delantera de jugadores que se conmemora hasta nuestros días, comenzó un éxodo de jugadores al fútbol colombiano. Atraídos por un mercado prometedor y una potencia futbolística en gestación, River Plate vio partir a gran parte de sus figuras. Sin embargo, la llegada de promesas del exterior, como jugadores de Uruguay mantuvieron al equipo en las primeras posiciones durante la década del 50. Tras estos resultados, pudieron realizar una gira por Europa en donde se midieron frente a equipos como el Real Madrid y el Manchester City. 

 

Tras estas giras y luego de la lesión de Walter Gómez, el jugador Enrique Sívori llega como titular al plantel de River Plate. Su talento con la pelota gustó tanto en el público que comenzó a ser llamado por clubes internacionales. Fue así que Sívori logró un pase por aquel entonces millonario al equipo italiano Juventus. Gracias al dinero de la compra de este jugador, la gestión del club River Plate pudo llevar a cabo la obra que necesitaba para cerrar su estadio. 

 

A partir de esto, la “herradura monumental” dejó de llamarse como tal para pasar a ser simplemente El Monumental, nombre por el cual es conocido ahora. Durante muchos años, fue el estadio con mayor capacidad de público, albergando en la actualidad 70.000 espectadores. 

 


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