Por Andres Fuentes
Si bien Boca Juniors siempre fue un gran equipo en Argentina y el continente, no fue hasta el año 2000 que dejó atrás las dudas y se posicionó entre los mejores del mundo. Entre ese año y el 2007, ganó cuatro Copa Libertadores, dos del mundo y por la institución pasaron varios jugadores de calibre internacional, que ahora son grandes ídolos indiscutibles del club de la Ribera.
Uno de ellos sin lugar a dudas es Jorge Bermúdez. Rápidamente fue capitán, referente y campeón del mundo, por lo que en años posteriores tuvo una importancia enorme en la Ribera, transformándose en caudillo de la zaga central y ayudando a sus compañeros. Tiempo después, regresó al club de la Ribera con otro rol: El de Mánager.
Fue entonces cuando en 2010 acercó al Xeneize a un futbolista que era promesa en Colombia, donde muchos lo comparaban con el propio ‘Patrón’. Respondía al nombre de Breyner Bonilla, defensor central que en ese momento jugaba en el Atlético Bucaramanga. Desde Boca aceptaron hacerle una prueba y fue directamente a la reserva, en donde se destacó en un duelo ante Tigre y enseguida le dieron lugar. Claudio Borghi lo usó de titular ante River, partido que ganó y donde él se destacó.
De todos modos, a medida que pasaban los partidos el defensor mostraba sus falencias y errores. Esto agotó la paciencia del 'Bichi' y los dirigentes, sobre todo luego de un duelo que perdieron 0-3 ante Colón, en donde el cafetero fue expulsado por una brutal patada. El destino lo ubicó luego en distintos clubes sin mucho éxito. Pasó por Sporting Cristal, Cúcuta Deportivo, Deportes Tolima (donde fue campeón), Defensor Sporting y ahora, con 36 años, se quedó libre de la Real Sociedad de Honduras, a la espera de una buena oferta para seguir jugando.
09/12/2024
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